Una profunda crisis humanitaria afecta a Gaza mientras los ataques y disparos israelíes han matado a más de 1,000 palestinos, muchos de los cuales buscaban desesperadamente ayuda alimentaria, según las Naciones Unidas. A pesar de los llamados internacionales para aumentar el acceso humanitario y el anuncio de 'pausas' y lanzamientos aéreos por parte de Israel, los informes indican que los civiles siguen siendo disparados o asesinados mientras esperan o se acercan a los convoyes de ayuda. El número de muertos por violencia y hambre está aumentando, con niños entre las víctimas, y la distribución de ayuda se ha vuelto peligrosa. La condena global está creciendo, con la ONU, el Reino Unido, Francia y Alemania instando a una acción inmediata para prevenir más hambrunas y muertes civiles. La situación sigue siendo grave mientras el hambre y la violencia persisten, y la presión internacional aumenta para una resolución significativa.
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