Una repentina escalada en el conflicto fronterizo entre Tailandia y Camboya en julio de 2025 resultó en docenas de muertes y desplazamientos masivos. El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, reclamó el crédito personal por lograr un alto el fuego rápido amenazando con aranceles elevados y aprovechando las negociaciones comerciales en curso. Ambas naciones del sudeste asiático acordaron detener las hostilidades y reanudar las conversaciones, con Trump presentándose a sí mismo como un 'Presidente de la Paz'. La medida ha recibido tanto elogios como críticas, con algunos funcionarios elogiando la paz mientras que otros advierten contra el uso de presión económica como herramienta diplomática. El alto el fuego se ve como un momento crucial para la estabilidad regional y podría abrir nuevas oportunidades para el comercio y la inversión en el sudeste asiático.
Sea el primero en responder a esta discusión general .